El CEA del Hospital MAZ-Zaragoza, pretende tanto su adecuación a la normativa autonómica como la consolidación del primer CEA de un Hospital de una Mutua de Accidentes de Trabajo y Enfermedades Profesionales, y consecuentemente, como toda acción pionera supondrá un importante reto, pero al mismo tiempo contribuirá a impulsar otros órganos similares en hospitales de otras mutuas.
Mutua MAZ, en su compromiso de evolución y mejora de la prestación de un servicio de calidad, ha promovido la creación de su propio CEA, que nació incluso con anterioridad a la reciente Ley 10/2011, de 24 de marzo de derechos y garantías de la dignidad de la persona en el proceso de morir y de la muerte.
Nuestra Entidad, en su calidad de entidad colaboradora en la gestión de la Seguridad Social, dedicada principalmente al accidente laboral y a las enfermedades profesionales, manifiesta con la creación de este Comité su deseo de mejora en todos los aspectos que pueden promover una mejor salud para sus pacientes. Entiende que el acto asistencial es dual por naturaleza incluyendo no solo un componente técnico, sino otro Ético.
La creación y funcionamiento de este Comité se orienta a lograr la excelencia también en el plano moral, no solo técnico, de nuestras actuaciones asistenciales.
El ámbito mutual y la Medicina del Trabajo son un campo especial y sus problemas pueden diferir del resto de ámbitos, por lo que su tratamiento, su atención, su investigación y la resolución en suma de cualquier dilema debe contribuir a la excelencia asistencial y a una reparación integral de la salud de cuantos pacientes sean atendidos en nuestro Hospital.
La necesaria regulación de esta figura esencial en el ámbito sanitario, se ha plasmado también en la reciente normativa autonómica. En la Comunidad Autónoma de Aragón, donde está situado nuestro Hospital MAZ, decidió regular la existencia de los Comités de Ética Asistencial en centros públicos y privados, siguiendo la estela iniciada por otras Comunidades, configurándolos como uno de los pilares básicos necesarios para dotar de seguridad jurídica, la regulación de la muerte digna en Aragón, tal y como se ha reflejado en la Ley 10/2011.